El Centro Penitenciario Quatre Camins situado en Barcelona es
específico para jóvenes entre 18 y 21 años, cumpliendo con la
necesidad de educar, rehabilitar e insertar en un entorno más
agradable, con modernas instalaciones adaptadas a las
condiciones que exigen los nuevos retos penales y sociales.
A ello ha contribuido Grupo Portillo mediante la aportación de
soluciones eficaces que garanticen el máximo control y
seguridad de los internos.
Desde el punto de vista arquitectónico, sus dimensiones y la
fuerte pendiente del solar han sido determinantes en la
implantación de los diversos edificios que lo constituyen, cada
módulo cuenta con los servicios básicos necesarios para un
funcionamiento autónomo.